¿Cómo Es Una Relación De Pareja?
Cuando empiezas una relación de pareja con otra persona se crea un tercer mundo completamente nuevo y único.
Juntos, creáis un universo totalmente diferente a los que hayáis conocido antes.
Apreciando y valorando este mundo es lo que te permite transformar tu vida y relaciones de pareja.
El amor tiene una cualidad espiritual que la mayoría de nosotros solo experimentamos unas pocas veces en nuestras vidas y muy poca gente realmente vive.
Cuando realmente amamos a alguien, hay un cambio dinámico que ocurre dentro de nosotros: Dejamos de enfocarnos en nosotros mismos.
Es lo que la gente que trata de conectar con su dios, el universo, el poder superior etc… experimenta cuando están en el estado más profundo de meditación.
Cuando estás enamorado de alguien, lo primero que ocurre es que el tiempo desaparece.
Es entonces cuando te das cuenta que no necesitas nada más porque tienes exactamente lo que deseas.
La tercera cosa que pasa es que desapareces.
Ya no se trata de ti.
Y aquí es cuando experimentas tu mayor alegría.
Pero muy pronto, las cosas cambian…
Empiezas a crearte expectativas sobre cómo debería ser tu relación de pareja.
Intentas adaptar este territorio salvaje, virgen y espiritual a tus deseos, tratando de forzarlo para que encaje con tus expectativas y requisitos en vez de crecer a lo largo de este territorio.
Empiezas a crear reglas y mides si el amor que recibes es suficiente o no.
En otras palabras, te lo tomas de manera personal.
Y ahí es cuando el amor empieza a morir.
Esto no tiene nada que ver con cuanto tiempo habéis estado juntos, tiene que ver con un patrón.
Una vez has desarrollado un sistema de creencias, siempre encuentras una manera de cumplir con tu sistema de creencias.
Esto no solo pasa en nuestras relaciones de pareja sino también con nuestra familia, amigos o compañeros de trabajo.
Cuando conectas con los demás, tienes un modelo sobre cómo deberían ser ellos.
Si ellos no encajan con tu modelo, empiezas a cuestionártelo todo.
- ¿Me he mentido a mí mismo?
- ¿Han dicho que me aman, pero no me aman?
- ¿Son mis expectativas demasiado altas?
- ¿Es que no soy suficientemente guapo, exitoso, inteligente?
Estas son preguntas internas profundas que la mayoría de la gente no quieren contestar o contestan demasiado rápido y fácil sólo para pasar página.
Lo que hace a la gente tan triste y deprimida con sus relaciones de pareja es su impotencia adquirida.
No saben cómo ganar.
Empiezan a ganar, consiguen tanta alegría del amor que reciben, pero entonces empiezan a creer que no dura.
Pero no es que no dure, es que no entienden las dinámicas de lo que crea esa química especial y la mantiene viva.